Un tros de paper

Reflexions, pensaments nus, muts, disfresats, sincers, optimistes i pesimistes.La vida, l'amor, la mort, l'oblit, les paraules, la comunicació, la traïció, l'humà, el shock amb la realitat, el futur, el passat, la bogeria reflexions, pensaments nus, muts, disfresats, sincers, optimistes i pesimistes.La vida, l'amor, la mort, l'oblit, les paraules, la comunicació, la traició, l'humà, el shock amb la realitat, el futur, el pasat, la bojeria

20/6/11

11/6/11

Trance inconsciente

manca de respir

lucha por un mejor

incertesa en el fer

fuerte contracción

 

L'ara em plau

no em plau la idea

ya me dijeron una vez

que el antes es peor que el después

 

I segueixo amb el meu

balanceig constant d'incerteses

 

Y continúo con la voz a medias

y el llanto escondido en la planta del pie

ahogado de tanto pisar suelo duro

 

Cadascú construeix la seva vida

però ningú ens ensenya a fer-ho

i en el camí, a vegades, costa respirar

9/6/11

Imagina que estás en un bar, cualquier bar de bocadillos de un barrio cualquiera de una gran ciudad. Imagina que ese bar está lleno de hombres mayores viendo el futbol y jugando a las cartas con cara de enfado.
Comprueba después que estos hombres, y la televisión, no hablan tu idioma ni ninguno que se le parezca: pon que hablan ruso. Mira a tu lado, ves una mochila llena: algo de ropa, una libreta, una botella de agua medio vacía, identificación y cuatro euros que gastarás en el bocadillo que comes porque te mueres de hambre. Pon que estás en un país extranjero, ni siquiera forma parte de la unión europea. Hace frío, mucho frío, no sabes nada de tu familia, ni siquiera sabes si alguna vez tuviste. Aunque pudieras, no tendrías a nadie con quien contactar, alguien para quien seas importante. Nadie sabe de tu existencia, eres pequeña y podrías morir de hambre o frío en cualquier momento y obviamente ningún desconocido te acogerá.
¿Puedes ahora aproximadamente saber qué es la soledad? ¿Te sientes sola?

2/6/11

A trozos esparzo la luna miedica del desconsuelo y construyo en mi sinrazón una humilde cosecha de luces calidas y doradas, de luchas por acabar que no tendrán final, de sorpresas atravesadas en el monte del desconcierto donde una noche alguien perdió su destello. Atravieso el verde sin oscuridad alrededor.

Cómo tener miedo cuando oyes tu órgano palpitante que, aunque no halle concordia con la razón, sigue adelante sincero en su causa.

El grito ya no es el grito o bien es otro grito, ha mutado, permite apertura hacia otros senderos, otros puertos del conocimiento que, en horas previas, desvalidos minaban por la falta de combustible… de esperanza.